No es violento, se pone así sólo cuando toma.

No hay excusas para la violencia. El alcohol o las drogas pueden potenciar conductas violentas, pero nunca son su causa. El violento es violento más allá de lo que consuma. No lo justifiques.

El maltrato emocional no es tan grave como el maltrato físico.

La violencia psicológica es la llamada violencia invisible. Produce en la víctima una sensación de desvalorización, intimidación, humillación y culpa. Sus consecuencias dejan cicatrices a veces más dolorosas que los golpes.

Si tu pareja te pone en ridículo o desvaloriza tus opiniones es porque te quiere poco.

Amar es respetar y admirar al otro. Alguien que te quiere y te valora, no se burla de vos ni te humilla delante de los demás. Tampoco se avergüenza de vos. Al contrario, se alegra de tus logros y siempre quiere lo mejor para vos.

Los varones nacen violentos.

No, no se nace violento. Este es un mito creado para justificarlos y perdonarlos. La violencia contra las mujeres es de origen cultural y parte de una idea de dominación: el deseo de controlar sus cuerpos, decisiones, oportunidades y hasta su deseo. Al ser un fenómeno cultural, es posible modificarlo. La forma de cambiarlo es entender que todos somos iguales y tenemos los mismos derechos.

Todas las parejas se pelean y alguna vez se gritan.

Es normal que en las parejas existan conflictos y diferencias, que se resuelven dialogando y buscando soluciones de a dos. Cuando las peleas van creciendo en intensidad a veces aparece el maltrato. Si es maltrato siempre se dará de forma repetida y empeorará con el tiempo.