EN TODO ESTAS VOS

SIGNOS DE ALERTA

Hay conductas y actitudes que al principio no te parecen tan graves, pero lo son. Prestales atención: te están advirtiendo que la relación en la que estás es desigual y no está basada en el respeto al otro.

Control

Si tu pareja quiere saber todo el tiempo dónde estás, con quién estás, qué estás haciendo, te llama  muchas veces por día, te escribe mil mensajitos o te pide tus contraseñas, no es porque te quiere, sino que busca controlarte. Así que desconfiá de frases como: “Te llamo tantas veces porque te extraño”; “Avisame dónde estás, así me quedo tranquilo/a”.

Control

Celos

Si tu pareja desconfía de todas las personas que te rodean, critica a tus amigos y amigas, a tu familia, a tus compañeras o compañeros de trabajo o estudio o no te cree lo que le decís, no es porque te quiere sino porque es un posesivo/a que cree que le pertenecés. Y nadie le pertenece a nadie. Así que desconfiá de frases como: "Ellos son malos con vos, pero yo te quiero".

Celos

Descalificación

Si tu pareja te hace sentir mal, desaprueba cada cosa que hacés, ridiculiza las cosas que decís o descalifica tus ideas, no es porque te quiere sino porque te desvaloriza. Así que desconfiá de frases como “Hacés todo mal”; “Sos un desastre”; “A vos, quién te va a dar trabajo”; “No servís para nada”. Esto sólo contribuye a que uno pierda la autoestima. Ninguna relación desigual está basada en el amor.

Descalificación

Humillación

Si tu pareja se burla de vos frente a otros, te hace pasar vergüenza delante de los demás o te obliga a hacer cosas que no querés, no es porque te quiere, sino porque busca humillarte para sentirse superior. Una relación donde uno se cree superior al otro no está basada en el amor.

Humillación

Indiferencia afectiva

Si tu pareja boicotea las salidas que a vos te interesan –cumpleaños de amigos o amigas, una reunión de trabajo o de estudio-, y te amenaza con que lo vas a perder si seguís haciendo lo que a vos te gusta, no es porque te quiere sino porque quiere que estés sólo con él/ella. Si escuchás frases como: “Te hacen trabajar toda la semana y justo organizan una reunión un sábado” o “Esa gente no te quiere, quedate conmigo”, desconfiá. Si dejás de hacer algo por temor a la reacción de tu pareja, quiere decir que la relación no está basada en el amor.

Indiferencia afectiva